Las buenas noticias del Giro

Pese a que el Giro de Italia ya es historia, aún perduran los sucesos más significativos. El más importante ha sido la superioridad del ganador, Alberto Contador, un corredor que ha ganado las 6 últimas vueltas grandes que ha corrido (3 Tour, 2 Giros y una Vuelta) y va directo a los puestos más destacados de la historia de este deporte. A ese elenco pertenecen sólo los más grandes: Eddy Merckx, Anquetil, Hinault, Indurain y Amrstrong. Contador además parece estar capacitado para lograr algo único, ganar las tres grandes vueltas en la misma temporada. No parece que vaya a ser un problema recuperar los esfuerzos del Giro. Ha ido a su propio ritmo y ha regulado los esfuerzos a su antojo. Si ganara el Tour y siendo español podría encontrar la suficiente motivación para intentar ganarlo. Es un reto muy difícil, pero es el único que le puede hacer frente.

Otro hecho destacable es el protagonismo de los ciclistas franceses y los nuevos nombres que ha aparecido. Francia no tiene representante en el podium desde 1990. Charles Mottet se clasificó en segunda posición por detrás de Gianni Bugno. Tampoco este año han podido tener a nadie en esos puestos de honor pero Gadret ha estado luchando por ese objetivo, se ha llevado una etapa y su compañero Hubert Dupond también se ha dejado ver. Es un dato más de la recuperación de ese país.

Ver a Steven Kruijswijk en novena posición o presenciar las victorias de los jóvenes Diego Ulissi, Eros Capecchi o la propia de Mikel Nieve ganado una etapa dantesca que recordó al ciclismo del pasado con los protagonistas actuales, es una muy buena noticia para el ciclismo. El pelotón se está regenerando.

Ante tanto brillo también ha habido una pésima noticia que entristeció al mundo entero: la aparatosa muerta de Wouter Weyland, un acontecimiento en el que el único culpable que se me ocurre es el destino.