Descoloca(dos)

Dos corredores con serias aspiraciones en la general del Tour de Francia han sufrido a una perdida de tiempo que les producirá más de una pesadilla durante este Tour. Los dos son españoles, Samuel Sánchez y Alberto Contador para más señas. Se vieron involucrados en la caída que hubo a nueve kilómetros de meta en la primera etapa y perdieron 1’20’’ segundos con respecto a otros favoritos. Hoy en la crono esa situación ha empeorado. Contador está a casi dos minutos de otros favoritos; Sánchez a casi tres. Será un handicap, no insalvable, pero si importante de cara a sus aspiraciones.

La pérdida de tiempo del primer día se debe a la mala colocación de ambos corredores. No admito el argumento de la suerte. Ese es, casi siempre, el argumento de los débiles, algo muy recurrente cuando no se quieren aceptar las responsabilidades propias. Tuve la ocasión de ver toda la etapa en directo. Vi en muchas ocasiones, sobre todo al final, a Andy Schleck, a Vinokourov, a Evans, a Gesink, Vandenbroeck, Wiggins a todos aquellos que aspiran a hacer algo grande en la carrera. Vi a todos menos a dos, a Alberto Contador y Samuel Sánchez y reto a cualquiera a que me enseñe un sólo plano de ambos corredores. No se les vio en ningún momento, jamás estuvieron en cabeza del pelotón, lugar en el que deben ir obligatoriamente todos los corredores importantes en ese tipo de etapas. Por eso son los mejores y por eso cuentan con sus respectivos equipos. Pero ni ellos ni sus equipos estuvieron a la altura. El resto de líderes iban con toda la prole de gregarios junto a ellos. En el momento de la caída Contador sólo contaba con un hombre junto a él. No estaban ni con él ni adelante. Algo imperdonable para un equipo que debe proteger al mejor corredor del mundo en ese tipo de pruebas. Euskaltel lo mismo.

Es cierto que una buena colocación no evita al cien por cien la posibilidad de caída como les sucedió posteriormente a Gesink, Andy Schleck, Basso, Wiggins y otros a falta de 2 kilómetros, o al propio Jurgen Van de Walle que se cayó tirando del pelotón, pero es prácticamente imposible evitarlas yendo en la mitad del pelotón, lugar en el que iban tanto Contador como Samuel. Es un error que pueden pagar muy caro.