El Tour de Francia 2011 ha sido testigo de un nuevo ciclismo que se venía imponiendo en los últimos años y que ya, esperemos, sea una realidad. Es el ciclismo de las nuevas directrices tomadas para recuperar la credibilidad de un deporte maravilloso. Es el ciclismo de la globalización, el ciclismo de la recuperación de Francia, un ciclismo de los líderes, sin tanto control de los equipos superpotentes. Es un ciclismo que respeta más que nunca las leyes naturales.
El hecho de que haya ganado un australiano es una gran noticia porque permitirá a ese país afincarse en la élite del ciclismo. A principios de temporada se hablaba de la moda australiana por la cantidad y calidad de victorias que llevaban los ciclistas del hemisferio sur. La victoria de Cadel Evans es la confirmación definitiva. En los ochenta Australia comenzó a ofrecer a cuentagotas algunos de sus talentos. A partir de los noventa fue un chorreo continuo que ahora ha culminado Cadel Evans, un ciclista tan perseverante, metódico y perfeccionista que al final se ha salido con la suya. Australia tiene grandes corredores, tiene una prueba ProTour, un proyecto de equipo que quiere pertenecer a la élite y tiene al ganador del Tour de Francia, un ciclista que ha hecho historia para ese país. Fue el primer Campeón del Mundo australiano y también lo ha sido del Tour de Francia. Es además el más veterano desde la segunda Gerra Mundial.
Francia también está de enhorabuena. Thomas Voeckler, Pierre Rolland y otros corredores lo han devuelto muy cerca de donde solía. Dos corredores se han clasificado entre los diez mejores y cinco entre los 15. Es algo que no ocurría desde 1991. 20 años han pasado, se dice pronto. Este año han estado luchando por el podium con Voeckler, que si no llega a portarse como un niño en el Galibier a estas horas estaría celebrando una hazaña que ni él soñaba al comienzo de la carrera. La victoria de etapa de Rolland en Alpe D’Huez (26 años después de que lo hiciera el último francés, Bernard Hinault), su undécimo puesto y el maillot blanco de mejor joven, llena de esperanzas a un ciclismo que necesitaba un Tour como este para recuperarse de la depresión que supuso el affaire Festina.
Ha sido un ciclismo de los líderes, donde cada líder, se ha tenido que sacar las castañas del fuego por si sólo, no siempre escudándose en superequipos que obligan al pelotón a comportarse como ovejas. Cuando atacó Andy Schleck en el Izoard, Evans tuvo que responder por sí solo en el Galibier. Cuando lo hizo Contador en el Galibier, respondieron Andy Schleck, Evans y Voeckler. Esas dos etapas fueron antológicas. Ese es el ciclismo que quiere la gente.
Y también ha sido un ciclismo más natural. Hoy en día casi nadie está a salvo de tener los lógicos altibajos que tiene el cuerpo a lo largo de 21 días de esfuerzo. Todos lo han sufrido, más o menos, pero todos. El que menos Evans, por eso ha ganado.
Por último, ha quedado claro que eso de ganar Giro y Tour el mismo año es prácticamente imposible. Si Alberto Contador no lo ha hecho, no lo hará nadie que pertenezca a este pelotón. El madrileño ha sido de largo el mejor corredor entre los que había disputado el Giro. Gadret (4º en el Giro) se retiró a las primeras de cambio. Kreuziger (6º en el Giro) apenas ha tenido protagonismo. Tiralongo (ganador de una etapa en el Giro) se retiró rendido. Contador se ha mantenido (caídas incluidas) en la disputa del podium hasta el último momento, y personalmente pensé que tal y como afrontó los Alpes tampoco la victoria era descartable. Su nivel físico no ha sido el mejor, pero su raza de campeón ha quedado patente.
En efecto ha sido un gran Tour y estoy totalmente de acuerdo en que parece ser se esta apostando por vias deportivas y mas limpias. Mi duda es si realmente hay un cambio de rumbo y una apuesta honesta por la limpieza de este deporte a todos los niveles o simplemente estamos ante un tiempo de impas o de espera, hasta la llegada de nuevos ”atajos”,que amplien las posibilidades de desbaratar el ferreo marcaje al que estan sometidos los ciclistas desde la llegada del pasaporte biologico, que digan lo que digan ha supuesto un antes y un despues dentro del rendimiento de los ciclistas(existen datos lo suficientemente esclarecedores que lo confirman)
Me alegro enormemente por Cadel Evans cuya trayectoria le convierte en un mas que digno merecedor de esta gran victoria.
Por ultimo, no se si ganar giro y Tour en un mismo año es algo imposible pero que dos hermanos suban al podium del Tour a la vez creo que es practicamente de ”ciencia ficcion”.Y lo que ya seria irrepetible es que Andy Schleck quede 2º en este Tour y gane su primer Tour en Agosto. Soy consciente de que todo parece apuntar a que no, pero entonces todo este jaleo durante todos estos meses?? No se le va a pedir explicaciones a nadie?.
Bueno Xabier, luego diras que no eres fan de Contador. Lo de ganar el giro y el tour el mismo año ya era dificil, y no lo tiene que demostrar Contador, ya lo dice la historia. El ultimo fue Pantani en el 98, y antes Indurain. Contador lo podra hacer si el tour se convierte en una Vuelta España. El tour si sigue haciendo etapas tan cortas, como la de Alpe D´Huez, quiza si podra ganar COnador giro y tour. Pero entonces el tour no seria el tour, porque este se diferencia de las otras grandes vueltas por el ritmo y tambien por la etapas alpinas duras y largas (de mas de 200km). En este tipo de etapas maratonianas y si van a un ritmo fuerte, a Contador no le veo tan fuerte, ya que COntador se caracterica por su explosividad, y en este tipo de etapas se queda sin ella. En este tipo de etapas le veo mas fuerte a Andy por ejemplo, pero esta claro que este ultimo tendria que mejorar mucho contra el crono si quiere ganar algun tour.