Mientras por estos lares andamos enredados en hacer lecturas de lo acontecido hasta el momento en la Vuelta a España y haciendo pronósticos de lo que puede deparar la durísima última semana, en Bélgica, país que vive como pocos el ciclismo, sobre todo en Flandes, están preocupados por el Campeonato del Mundo y sobre todo por la selección que representará a su país en su propio territorio. El debate se centra si debe o no estar Remco Evenepoel, corredor que ofrece exhibiciones cada vez que se sube a una bicicleta. Desde que volvió de los Juegos Olímpicos de Tokyo ha ganado todo lo que ha corrido; el Tour de Dinamarca, el G.P. Overijse y la clásica de Bruselas. Esta semana está participando en el Tour de Benelux, en la que es, cómo no, uno de los favoritos a la victoria final.
Sinceramente el debate me parece estéril, injustificable, y así se lo ha hecho saber a través de twitter Pieter Serry, corredor belga, a su seleccionador, Sven Vanthourenhout, diciéndole que estaría ciego si es que definitivamente no cuenta con Evenepoel para la carrera que encumbrará al nuevo Campeón del Mundo el 26 de septiembre en Leuven. Patrick Lefevere, en su columna semanal en el diario Het Nieuwsblad, no ha sido tan explícito pero le ha aconsejado a Vanthourenhout que espere hasta el último instante para decidirse por uno u otro corredor, dejándole caer, eso sí, que no entendería que el equipo más victorioso de la temporada (el Deceuninck-Quick Step) no esté representando en abundancia o acorde al palmarés de sus corredores. De momento lo único que tiene claro Vanthourenhout es que el único líder que se plantea llevar al Campeonato del Mundo es Wout Van Aert, corredor que ha preparado con mimo en Livigno (Italia) las dos citas mundialistas y que según ha declarado el propio corredor prefiere ser el único líder de la selección.
Conozco personalmente a Sven Vanthourenhout, y me parece un tipo muy profesional, muy conocedor de todos los aspectos que tienen que ver con el rendimiento de un ciclista, sensato, cercano, con mucho ojo y buen estratega. El seleccionador ideal, vamos. Pero no acabo de entender el problema que ve en Remco Evenepoel. Quizás está arrepentido por el resultado de los Juegos Olípicos de Tokyo, donde es innegable que el joven prodigio no rindió, ni de lejos, a su nivel, pero posteriormente ha ofrecido exhibiciones que quitan el hipo. Parece que no le perdonan su bajo rendimiento en la cita olímpica.
Nunca he creído que tener a muy buenos corredores en el mismo equipo pueda ser un problema si se les sabe llevar y se les trasmiten las ideas claras. No creo que Evenepoel se enfrentara a las órdenes de su seleccionador y además creo que puede cumplir perfectamente el rol de líder compartido con Wout Van Aert, porque su forma de correr puede ser completamente diferente y, además, complementaria. Evenepoel está acostumbrado a obrar desde lejos, con ataques como en Overijse a 60 kilómetros de la meta y reventar a los osados que se atreven a intentar seguir su rueda. Con esa simple jugada, Bélgica podría asegurarse una carta que casi ninguna otra selección posee, y además permitiría ir mucho más relajado a un Van Aert que tendría todas las de ganar en un grupo más reducido, su especialidad.
Tal y como está corriendo actualmente Evenepoel, sus movimientos deberán ser vigilados como los de Messi en el fútbol, porque si le permiten darle un metro, no lo ven hasta la meta dado sus extraordinarias condiciones como contrarelojista, y su persecución ofrecería a Van Aert un sofá en primera línea para posteriores requerimientos. Me parece que ninguna selección debería excluir por propia voluntad las opciones que permitiría un corredor como Evenepoel, que descargaría de mucha presión a un Van Aert que en otras circunstancias estaría muy apretujado en su condición de líder único, aunque él ha reconocido sentirse muy cómodo en ese papel. A mi, me parece un tema que no admite discusión, pero que por el momento no tiene concreción.
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