Por alguna razón muy difícil de explicar, Remco Evenepoel se hacía un lío con rampas superiores al 10%. Es algo que se ha venido repitiendo hasta la presente Vuelta a España que está liderando con una superioridad sideral. Era algo muy extraño que un ciclista de 64 kilogramos (ahora, dicen que 62) y con la potencia descomunal que exhibía en porcentajes algo menores, se clavara de esa forma. Algo inexplicable. Los teóricos no daban crédito a lo que veían, las calculadoras daban un resultado erróneo y sus seguidores se deprimían al ver puertos con rampas tan verticales. El propio ciclista comenzó a ver fantasmas en esas pendientes tan pronunciadas donde ciclistas de inferior categoría le enseñaban, no pocas veces, el dorsal, algo que no le agrada nada al ciclista flamenco.
Pero Evenepoel es un ciclista tan orgulloso que está dispuesto a superar cualquier barrera que se presente ante sus objetivos, que en estos momentos es ganar la Vuelta a España, algo que no ocurre desde 1977, cuando el gran Freddy Maertens se llevó además de la general 13 victorias parciales. De hecho las últimas victorias en grandes vueltas de corredores belgas son de las mismas fechas: Tour de Francia 1976, Lucien Van Impe, y Giro de Italia 1978, Johan de Muynck.
En estos momentos todo hace indicar que esa racha negativa de más de 40 años va a finalizar cuando la carrera llegue a Madrid con Evenepoel encumbrado como lo que es, un gran corredor que va camino de gran campeón.
Decía el joven corredor antes de iniciarse la carrera, que su principal objetivo era una victoria de etapa. Seguramente llegará en la crono de Alicante y muy probablemente con grandes diferencias a favor del mismo, pero considero que lo que ha logrado hasta ahora es incluso más importante que una victoria parcial, porque en las dos etapas de Asturias, con los puertos finales con pendientes de carreras de Mountain Bike, ha ahuyentado por completo los fantasmas que le impedían ejercer la lógica y, ahora, nada le detendrá. Se ha dicho muchas veces que a ese motor descomunal que le ha dado la naturaleza, le hacía falta regularidad y equilibrio mental para ser capaz de cualquier cosa. Todo hace indicar que lo está logrando. Algunos siguen recordando el Giro de Italia del año pasado, pero personalmente no lo tomaría como referencia porque nada tiene que ver ni con la preparación que pudo realizar para la carrera italiana (muy escasa por las complicaciones tras la caída del Giro de Lombardía), ni todo lo que ha ido aprendiendo ante las duras críticas por sus comportamientos y gestos desmedidos en no pocas ocasiones.
Evenepoel es un ciclista mucho más maduro que hace un año tanto física como mentalmente. Solo le quedan dos semanas para mostrarlo al mundo, 15 días que serán complicados porque la presión irá “in crescendo” y nunca se puede dar por definitivo algo que no se ha logrado. Pero él está convencido de su victoria, y sus adversarios, me da que también.
Responsable: Biolaster, S.L, finalidad: Dar respuesta a las solicitudes de información, legitimación: consentimiento del interesado, destinatarios: no se comunicarán datos a terceros, derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos, así como otros derechos, como se explica en la información adicional. Política de Privacidad.