Esguince de Tobillo
Esguinces de tobillo
El esguince de tobillo es una lesión importante, de gran repercusión en la vida y el rendimiento del deportista, pero también de la población en general, como puede deducirse de los siguientes puntos:
- Frecuencia. En todas las publicaciones el esguince de tobillo es la lesión que encabeza la estadística, tanto en atenciones de urgencias hospitalarias como deportivas. La incidencia es, lógicamente, mayor en deportes en carga, de contacto y saltos, como el baloncesto, balonmano y fútbol. En general, suponen entre un 15 y un 20% , según datos de las diferentes publicaciones, de todas las atenciones por lesión deportiva y es la más frecuente en las urgencias de Traumatología.
- Repercusión en el rendimiento deportivo. Además de suponer un número de bajas importante, con períodos variables de incapacitación deportiva que van de una semana a tres meses dependiendo del grado del esguince, los esguinces de tobillo producen secuelas inmediatas y tardías que influyen en el rendimiento deportivo.
- Trascendencia futura de la lesión. Los esguinces de repetición son causa de lesiones progresivas y degenerativas en el tobillo. Cada vez es más fácil un nuevo episodio porque cada vez son más débiles las estructuras de contención. A esto se suman los efectos sobre el interior de la articulación, como formación de tejidos de cicatrización, fibrosis, desprendimiento de fragmentos de cartílago y degeneración articular. Es frecuente ver imágenes radiológicas de jóvenes deportistas de alto nivel llenas de osteofitos, con disminución de la altura articular por degeneración del cartílago y, en definitiva, con un proceso artrósico en marcha que dejará secuelas irreversibles una vez abandonada la práctica deportiva.